Violencia contra la PAM

La violencia [blank_start]psicológica[blank_end] es toda acción u omisión destinada a degradar, controlar y bloquear las acciones, autonomía, decisiones, comportamientos y creencias de una persona, mediante intimidación, manipulación, amenaza directa o indirecta, humillación, aislamiento, celos excesivos, agresión verbal y burla.

Se entiende por violencia [blank_start]física[blank_end] toda acción u omisión que arriesga o daña la integridad física de la persona. Comprende el uso de la fuerza física o coerción contra la víctima, poniendo en riesgo o dañando su integridad física

La violencia [blank_start]sexual[blank_end] es la acción que obliga a una persona adulta mayor a mantener contacto sexualizado, o a participar en otras interacciones sexuales mediante el uso de la fuerza, intimidación, coerción, chantaje, soborno, manipulación, amenaza o cuando no se está en condiciones de consentir o cualquier otro mecanismo que anule o limite la voluntad personal y que al agresor ofrezca gratificación.

La violencia [blank_start]patrimonial[blank_end] es la acción u omisión que implica daño, pérdida, transformación, sustracción, destrucción o retención o distracción de objetos, instrumentos de trabajo, documentos o personas, bienes, valores o derechos o recursos económicos destinados a satisfacer las necesidades de alguna de las personas mencionadas anteriormente

Todo comportamiento que tienda al descuido, desatención y abandono de una persona que no está en condiciones de valerse por sí misma por razones de edad, enfermedad o discapacidad. La definición anterior correspone a un tipo de violencia, llamada [blank_start]negligencia[blank_end].

La violencia [blank_start]institucional[blank_end] abarca aquellos maltratos que se presentan en instituciones, establecimientos y organizaciones públicas y privadas que atienden y brindan servicios y cuidados a las PAM