En general un problema y un incordio. Que invadan mi espacio no es lo mío.

Está bien, podría convivir con un animal siempre y cuando no recaiga su responsabilidad en mi.

¡Me gusta la idea! Probablemente sea más cómodo no tenerla pero, ¿Y lo monos que son?

Me molestaría bastante. Los perros huelen y hay que sacarlos a pasear. En general, me sentiría incomoda ante esta situación.

Me da igual. Si tiene un perro y lo trae es su problema.

Me da igual pero, a pesar de que es su responsabilidad, le ayudaría un poco a cuidarlo. Por ejemplo, si hay que ponerle pienso, se lo pondría.

¡Me entusiasma tener otro compañero de piso! Solo espero que sea majo y obediente.

¡Que bien! Me uno a ellos. Me encanta pasear, el sol y jugar con el perro.

Bueno, vale, si no hay nada mejor que hacer... pero el perro me está empezando a saturar.

Odio a ese perro. No me gusta la idea de tener un perro. Que se vayan, así puedo estar un rato sin pisar la alfombra perruna esa que dice Andreu es un perro.

Me cago en la puta por que ahora debo sacar al perro justo después de llegar del trabajo.

Guay, en realidad no me importa sacar hoy al perro. Es solo un ratito, me despejo y, total, un día es un día. ¡Seguro que él también lo haría por mi!

¡¡Brutal!! Es mi oportunidad para sacar al perro. ¿Debería aprovechar para irme a correr con él?

Un gato. No huelen, no hay que sacarles a pasear, pasan de ti en general y encima, son taaaan bonitos.

Un perro. Son más inteligentes, establecen un vínculo mucho más fuerte con la gente a la que quieren y, son tan graciosos!

Me molan ambos.

No quiero mascotas. Ni un hamster. QUE ASCO ME DAN.

Paso de largo. Bastantes problemas tengo ya...

Me paro y la recojo, hay que buscarle dueño ¡YA!

Bueno, podría convivir con nosotros. ¿Por qué no? Me parece que Andreu está dispuesto a tener un compañero perruno.

Joder, Joder, menudo marrón.