En otras partes del Este asiático, los partidos comunistas
también lograron armar ejércitos populares, estrechar lazos
de solidaridad, fortalecer el patriotismo y convecer a la
mayoría de la población de que el capitalismo y el
imperialismo traían consigo la explotación y la miseria de los
pueblos, mientras que el comunismo les proporcionaría una
vida digna.
En 1948, en el norte de Corea se formo
la República Popular bajo el gobierno
comunista de Kim II Sung, impulsó la
idea Zuche, una ideología coreana
extremadamente nacionalista que
exaltaba la fuerza y la decisión del
pueblo para luchar por la
independencia y conseguir "la
grandeza de la patria".
En 1950, los norcoreanos, apoyados por China y la
URSS, invadieron el sur.
Estados Unidos y quince naciones
más, con el aval de la ONU, enviaron
tropas al mando del general Douglas
MacArthur y expulsaron a los
comunistas.
Con el objeto de unificar el país y celebrar elecciones
libres, aunque en realidad con el fin de ganar la
península para su causas.