para Alberto Magno la ciencia del Ser y de sus
propiedades trascendentales, entre las cuales son
las más importantes la unidad, la verdad y la
bondad (unum, verum, bonum), conceptos que
este filósofo analiza y discute con notable
profundidad, lo mismo que la idea de Dios, que
constituye el objeto de la teología natural.
Concepción psicológica
es tan completa, filosófica y científica como permitía el
estado de la ciencia a la sazón, siendo muy numerosas
y acertadas las observaciones de que echa mano al
desenvolver el concepto del alma racional en sí
misma, en sus facultades, en sus relaciones con el
cuerpo y hasta por parte de la gradación o escala de la
vida y de sus manifestaciones.
La Filosofía de Alberto Magno es la Filosofía aristotélica
incorporada y como encarnada en la Filosofía cristiana,
en la parte en que aquélla no se opone a las verdades
fundamentales de ésta, pero sin excluir, antes bien
asimilándose elementos platónicos e ideas de las
escuelas árabes, judaicas y neoplatónicas. Alberto
Magno, lejos de seguir ciegamente a Aristóteles, según
piensan algunos, pone de manifiesto y combate sus
errores cuando se presenta la ocasión; reprende y
ridiculiza a los que hacen de él una especie de Dios, y
recuerda oportunamente que, puesto que fue un hombre
como nosotros, pudo errar como nosotros: Si autem
creditipsum (Aristotelem) esse hominem, tunc
proculdubio errare potuit, sicut et nos.
Importancia especial de Platón
a quien coloca al lado de Aristóteles, considerándole
como complemento necesario y natural del Estagirita
en el terreno filosófico, de manera que, en concepto
de Alberto Magno, las Filosofías de Aristóteles y de
Platón se completan la una a la otra: Scias, quod non
perficitur homo in philosophia, nisi ex scientia duarum
philosophiarum, Aristotelis, et Platonis.
Teoría cosmológica
conviene tener presente que, lejos de admitirla emanación divina del
mundo, como tan inexactamente y tan sin fundamento le atribuye
Tennemann, enseña y afirma terminantemente que Dios creó el mundo
de la nada: Mundus a primo Creatore solo Deo incepit per
creationem.... Deus ex nihilo fecit mundum.
problema de los universales en el sentido del realismo moderado
refutando a la vez el nominalismo y el realismo platónico. A
pesar del carácter de sutileza excesiva que los autores
contemporáneos solían dar a la lógica, en la que se trataba la
cuestión de los universales, la definición que Alberto Magno
da de esta ciencia se distingue por su carácter comprensivo, y,
digámoslo así, práctico y positivo, apellidándola la sabiduría o
ciencia que enseña de qué modo y por qué medios llega la
razón a lo desconocido por medio de lo conocido: Docens
qualiter et per quae devenitur per notum ad ignoti notitiam.
ideas y teorías especiales
no ya sólo en orden a ciencias determinadas, como geografía,
química, astronomía, etc., sino con respecto a las ciencias
propiamente físicas, o sea a la Filosofía natural, como entonces se la
apellidaba; pero que no se decidió a manifestarlas, en atención a que
los hombres de su época no se hallaban en disposición de recibirlas y
comprenderlas. En más de una ocasión el maestro de Santo Tomás
advierte que expone y presenta la doctrina de Aristóteles y de otros
filósofos, y no la suya propia, insistiendo sobre esto de una manera
más explícita y significativa cuando se trata de la física: Dicta
Peripateticorum, prout melius potui, exposui; nec aliquis in eo potest
deprehendere, quid ego ipse sentiam in philosophia naturali.