REPLICACIÓN “IN VIVO” DEL ADN
La enzima que lleva a cabo la replicación del ADN es la ADN polimerasa, esta
enzima tiene unos requerimientos específicos para trabajar, que le imponen
restricciones:
1. Sólo añade nucleótidos en la dirección 5’ 3’.
2. Necesita para poder empezar a copiar y unir nucleótidos un molde de ADN.
3. Necesita un pequeño trocito de ARN al cual unir los nucleótidos, ya que ella no
puede empezar a unir los nucleótidos sin tener una pequeña cadena ya formada.
4. Utiliza nucleótidos trifosfato.
Dadas las necesidades de esta enzima y sabiendo que la molécula de ADN está
formada por dos hebras antiparalelas, se plantea un problema en la cadena de ADN
que va en la dirección 5’ 3’, porque aquí la enzima estaría trabajando en la
dirección contraria, y sin embargo, se observa que las dos hebras se van replicando.
La solución al dilema la dio el desabrimiento, en 1968, por Okazaki de unos
fragmentos constituidos por unos 50 nucleótidos de ARN y entre 1.000 y 2.000
nucleótidos de ADN, denominados fragmentos de Okazaki. Así se podía explicar
como se copia esta cadena, siendo de forma discontinua en la dirección 5’ 3’ y la
otra cadena de forma continua. También quedaba solucionado el problema de que la
enzima necesitara una cadena de ARN a la cual unir los nucleótidos.