Desde hace miles de años se sabe
que el vinagre, el jugo de limón y
muchos otros alimentos tienen
un sabor ácido. Sin embargo, no
fue hasta hace unos cuantos
cientos de años que se descubrió
por qué estas cosas tenían un
sabor ácido. El término ácido, en
realidad, proviene del término
Latino acere, que quiere decir
ácido.
Ácidos
(Propiedades)
Cambian de color a los
indicadores tratados
previamente con ácidos.
En disolución, presentan sabor
amargo, también destruyen los tejidos
vivos y conducen la corriente eléctrica.
Anulan ("neutralizan") el
efecto de los ácidos.
Generan precipitados
(sustancias en fase sólida en
el seno de un líquido) al ser
puestas en contacto con
ciertas sales metálicas
Neutralización
Los ácidos sueltan H+ en la solución y las bases
sueltan OH-. Si fuésemos a mezclar un ácido y una
base, el ión H+ se combinaría con el ión OH- ion
para crear la molécula H2O, o simplemente agua
Bases
(Propiedades)
Colorean de forma característica a ciertas
sustancias llamadas "indicadores". Por
ejemplo, enrojecen al tornasol y decoloran
la fenolftaleína enrojecida.(El tornasol
cambia de color rosa a azul)
Producen efervescencia al
contacto con el mármol
Reaccionan con algunos
metales desprendiendo
hidrógeno.
En disolución diluída tienen sabor picante
característico, pero si están concentrados
destruyen los tejidos biológicos vivos