Se denomina fluido a un tipo de medio continuo formado por alguna sustancia entre cuyas
moléculas sólo hay una fuerza de atracción débil. La propiedad definitoria es que los fluidos pueden
cambiar de forma sin que aparezcan en su seno fuerzas restitutivas tendentes a recuperar la forma
"original" (lo cual constituye la principal diferencia con un sólido deformable, donde sí hay fuerzas
restitutivas).
Fluido newtoniano
Un fluido newtoniano es un fluido cuya viscosidad puede considerarse constante en el tiempo. La
curva que muestra la relación entre el esfuerzo o cizalla contra su tasa de deformación es lineal y
pasa por el origen. El mejor ejemplo de este tipo de fluidos es el agua en contraposición al
pegamento, la miel o los geles que son ejemplos de fluido no newtoniano. Un buen número de
fluidos comunes se comportan como fluidos newtonianos bajo condiciones normales de presión y
temperatura: el aire, el agua, la gasolina, el vino y algunos aceites minerales.